No nos ganan más! Oriente Petrolero 3 - 2 Blooming

Se acaba el partido, iban a ser 2 puntos perdidos de 3 que parecían ya asegurados por como se dio el partido. Pero ahí apareció el capitán, que fue a buscar el cabezaso convencido que lo iba a hacer, le dijo con gestos a Meleán que retrocediera por que el iba a subir a hacer el gol y lo hizo, hubo conexión aérea con Gualberto que lanzó un centro como con la mano que Raldes aprovechó para marcar el 3 a 2 final y desatar la locura en la parcialidad albiverde. Es que ganar un clásico sobre la hora se goza el doble. Más aún si los de la bereda de al frente estaban festejando el empate.

Fue un partido que pudo tener una resolución más tranquila, pero el equipo con el 2 - 1 a favor y con un jugador más en la cancha se relajó, grave error, por que así llegó el penal en contra de Brau a Almirón, que puso un empate injusto por que Blooming solo se dedicó a defenderse y a especular. El que propuso fue Oriente y tuvo su premio en el final.

Hay que corregir algunas cosas sobre todo en lugares puntuales, en el lateral Hoyos tiene que mejorar su rendimiento físico, ayer se cansó en el primer tiempo, se condicionó con esa amarilla que pudo ser roja luego del codazo al paraguayo Ayala. Los 2 goles vinieron por pelotas filtradas por el medio de los centrales, Brau y Raldes tuvieron parte de responsabilidad en no interceptar esas pelotas así como también las tuvieron Meleán y Danny Bejarano que dejaron a los mediocampistas de Blooming (Sandoval y Koke) dar esos pases. Arriba Duk tiene que mejorar la definición, valoramos su voluntad, sacrificio pero el 9 está para meterla, es un tipo trabajador y confiamos que con trabajo va a conseguir ser más efectivo.

Bien por Tabaré que leyó muy bien el partido, sacandolo a Hoyos que era un candidatazo a ser expulsado por que ya tenía amarilla y el paraguayo Ayala lo tenía a mal traer. Lo metió Fernando Saucedo (que estuvo otra vez impreciso) y lo hizo retroceder a Zabala que cumplió bien su trabajo de lateral.

Mojica y Quero fueron fundamentales en la generación de juego. Gualberto hace lo que quiere con la pelota cuando se dedica a jugar y no se preocupa por renegar con los árbitros. Quero cada partido juega mejor, tiene una visión distinta y su pases normalmente llegan a los pies de sus compañeros.

Párrafo a parte para la hinchada que otra vez tiño el Tahuichi de verde, sin problemas dentro del estadio y sin reventar cohetes que perjudiquen al club. Se alentó en momentos claves y se empujó al equipo para conseguir ese triunfo más importante.

Ahora a seguir trabajando, este equipo está para salir campeón si sumamos todos los puntos de local y logramos unos cuantos puntos más en la altura.

Fuente: www.videobolivia.com